El Mesón del Brazo Amigo

Hoy estaba leyendo blogs de amigos, una vez más, cuando en el de Alberto me he encontrado algo. El post es curioso, ya en si mismo, y como no podía ser menos viniendo de él (vaaaaaaale, los de deportes me aburren un poco, pero solo esos y porque no entiendo :P... ejem, y los de Eurovisión, y... ¡que no, que es bromaaaaa) pero en esta ocasión lo que más me ha llamado la atención ha sido la ilustración que la acompañaba:



Esta es una de tantas imágenes que pululan por la red y que la gente usa como avatar o mil cosas, pero tiene muchos recuerdos para mí.

Es Aenon, el Semielfo, bardo de profesión y compañero de aventuras en el Mesón del Brazo Amigo.

El Mesón es un grupo de msn creado el uno de junio de 2003 por Catti Sibbernid, guerrera, mesonera y veleta sin par. Catti es una gran persona, una amiga a la que conocí con el sobre nombre de Melian hace mucho tiempo, en otro foro de msn donde de lo que se hablaba era de Tolkien, y con la que continúo en contacto a pesar de los años y de no haber podido vernos nunca en persona (ainsss, qué mala es la distancia).


Ella nos brindó un universo en el que poder jugar, narrar y divertirnos mucho y durante mucho tiempo. Es un foro donde han nacido historias y personajes, hemos construido aventuras entre todos, en algo que sin llegar a ser un juego de rol se le parecía mucho, hemos conocido a gente maravillosa (Torgest, Nohalos, Aenon...), un mundo que trascendía con los propios personajes del foro al messenger en fabulosas conversaciones múltiples de siete y ocho personas en las que los personajes nos tirábamos los trastos a la cabeza y nos reíamos hasta no poder más.

Porque con el tiempo se formaron las parejas (de juego, de juego, aunque creo que alguna fuera de juego llegó a formarse también), primero el perseguido Torguest, al que todas las chicas perseguíamos, y que cuando pareció que lo había cazado Maewyn resultó que se le escapó de las manos y terminó la cosa en boda hace muy poquito con Catti (es lo que tiene ser la jefa, que se lleva a guapo de turno :P) luego Tomoe y Nohalos, que tuvieron a su hija Jade, ainssss... más tiernooooo.

Mi primer personaje allí fue Marianna, una jovencita que parecía dulce, callada, atenta... y cuya imagen era más o menos la que sigue, pero que en realidad escondía un culebrón por lo bajo y era un mal bicho.



Marianna era una guerrera maga con tramas y subtramas que solo sabíamos los que las íbamos desarrollando, metiendo a los demás en el saco de nuestra propia historia en la que participaban como uno más, sin saber qué secreto escondíamos (y muchos sin llegar a sospechar que había un secreto) pero hecha un elefante en una cacharrería. De la dulce encargada de las habitaciones, cuando salía del Mesón en sus aventuras no quedaba nada, más bien una adicta a las bolas de fuego y los estocazos XDDDDDD
Peeeeeeeeeeero me aburrí de ser niña buena todo el rato. En connivencia con la jefa me hice a Nathrael, "paladina" de Sharess. Un personaje con menos trasfondo pero desde cualquier punto de vista más divertido. Nath es una descarada, provocona, hedonista y fanática religiosa. Por si fuera poco tiene un peculiar sentido del humor y trata de tirarse a todo lo que se le cruce por el camino (ehh, como ofrenda a Sharess, no os vayáis a creer que es por otra cosa, mal pensados ¬¬) Y con Nathrael llegaron tramas muy chulas, con las que me he divertido a muerte, desde luchas intestinas a tonteos y noviazgos. Lo mejor, el noviazgo, porque se fue a enamorar de Aenon, y Aenon es muy bueno, muy santo, muy majo, pero un tanto vago y bastante torpón, con lo que las situaciones cómicas se daban casi continuamente. En fin, no os voy a aburrir con las historias de mis personajes (como buena rolera vieja) pero sí quería dedicar este post a un sitio y a una gente que me hicieron pasar ratos maravillosos, con los que soñé, me reí, lloré y se forjaron lazos que el tiempo no ha terminado por cortar.

Porque aprendí a narrar en grupo, a compartir, a hacer cosas estupendas gracias a Alma, a Rafa, a Carlos, a Borja, a Dulce... a tantos que el post sería eterno solo nombrándoles.

Alberto al subir esa foto me ha despertado la morriña. No todo tiempo pasado fue mejor, pero esa época y esa parte de mi vida fue maravillosa. Espero que algún día volvamos a tener ganas de forjar historias y nos volvamos a juntar en nuestra casa, en ese mesón enorme que abría las puertas a todos los caminantes y nos permitía llenar la vida de sueños y aventuras.